miércoles, 22 de febrero de 2012

Huele a azufre en el Vaticano

Filtraciones en el Vaticano (Vati-leaks)
Casos de corrupción en licitaciones, un banco estatal ligado a mafias y blanqueo de dinero y un plan para asesinar al jefe de Estado. A pesar de que todos estos elementos nada santos parecen formar parte de la rutina de un país en el que impera el crimen, provienen de uno más cercano al cielo que a la vida terrenal. Sí, estamos hablando del Vaticano.

El propio vocero de la Santa Sede, Federico Lombardi, le puso nombre al escándalo que ha estado golpeando al Vaticano en las últimas cuatro semanas. Como ‘vatileaks’ calificó el sacerdote a las filtraciones de documentos confidenciales del mencionado Estado que han aparecido en varios medios italianos.

“La administración estadounidense tuvo Wikileaks, al Vaticano le han tocado ahora sus ‘leaks’, fugas de documentos que tienden a crear confusión y desconcierto y a poner en entredicho al Vaticano, al gobierno de la Iglesia y, con más amplitud, a toda la Iglesia”, afirmó Lombardi el lunes pasado.

GUERRA SANTA
¿Cómo empezó toda esta historia que vuelve a manchar la reputación de la Santa Sede? A mediados de enero pasado, dos cartas del actual nuncio apostólico en EE.UU., Carlos María Viganó, sacudieron los cimientos de las iglesias de Roma al revelar un caso de corrupción en licitaciones realizado en el Vaticano.

La denuncia fue considerada un capítulo más de la pugna existente entre Viganó y el secretario de Estado, Tarcisio Bertone, debido al traslado del que fue objeto el nuncio. De acuerdo a lo que señala Viganó, en las misivas enviadas al Papa, perdió el puesto de secretario general del Governatorato de la Ciudad del Vaticano por haber implantado una política de rigor en la administración de los bienes de la Santa Sede.

“Los banqueros que integran el llamado Comité de Finanzas y Gestión se preocupan más de sus intereses que de los nuestros, y en diciembre del 2009 en una operación financiera perdieron 2,5 millones de dólares”, indicó el sacerdote en una de sus misivas. “Durante mi gestión logré que el Vaticano pasara de ocho millones y medio de pérdidas en el 2009 a un beneficio de 34,4 millones en el 2010”, añadió.

Asimismo, en la carta se vincula al mencionado comité con la secretaría de Estado que dirige Bertone.

De acuerdo con el historiador de la PUCP Juan Fonseca Ariza, es la primera vez que se hacen tan públicas las disputas internas. “Esta pugna existe desde la etapa de Juan Pablo II pero nunca se había dado el caso de que lleguen documentos a los medios”, expone.

DEFENSA
El Vaticano no demoró en salir al frente de las denuncias pero atacó al mensajero y no a la fuente. Lombardi amenazó con emprender acciones legales contra la televisora italiana La7, donde se emite el programa “Los intocables”, por haber difundido documentos reservados y dañar la honorabilidad de miembros de la Iglesia.

“Se ha presentado [al Gobierno del Vaticano] de modo parcial y banal, exaltando evidentemente los aspectos negativos”, afirmó.

COMPLOT
Tres semanas después otro documento filtrado volvió a sacudir a la Iglesia. El diario “Il Fato Quotidiano” publicó un informe en el que se recogía una conversación del cardenal de Palermo, Paolo Romeo, en la que afirmaba que existe un complot contra el Papa.

“Seguro de sí mismo, como si lo supiese con precisión, el cardenal ha anunciado que al Santo Padre le quedan dos meses de vida”, indica la nota que tiene como fecha el 31 de diciembre. Nuevamente el Vaticano reaccionó con fuerza y señaló que la nota era un conjunto de divagaciones que no deben tomarse en serio.

Ante estos hechos, las últimas declaraciones de Lombardi buscan mostrar que detrás de las filtraciones existen más intereses particulares que una búsqueda de hacer justicia.

“Quien facilita este tipo de documentos los utiliza para objetivos que no son, de seguro, el amor puro a la verdad”, indicó el vocero en un comunicado.

Una posición similar es la que tiene el decano de la Universidad de la Santa Cruz, Diego Contreras. “En todas las instituciones hay gente mediocre que acaba culpando a los demás de su propia mediocridad”, indicó en su blog.

No obstante, para Fonseca Ariza, la respuesta del Vaticano no es coherente con sus doctrinas. “Es lo mismo que hizo Washington con Wikileaks. Solo busca cuidar sus intereses”, expuso.

Vati-leaks y los servicios secretos pontificios
Tanto El Mundo como El País, se han hecho eco del escándalo de las filtraciones vaticanas, debido a las cuales tiemblan unos cuantos altos cargos del Estado Pontificio, entre ellos el "primer ministro" cardenal Tarcisio Bertone. El Papa está solo, dicen los bien enterados, es un pastor rodeado de lobos. Pero ¿Sabíais algo de los servicios secretos vaticanos?

No obstante la tardía fecha de publicación de la noticia en España, el semanal italiano L'Espresso - en su entrega del 9 de febrero - ya relataba ampliamente este tema y pintaba un panorama bastante negro para Ratzinger: como es habitual, el escándalo y las filtraciones tenían mucho ver con asuntos extremadamente terrenales cuales contratas a dedo, gestión de los fondos del IOR (el banco vaticano) y otras voces significativas que le han costado el puesto al cardenal Carlo Maria Viganò, ex secretario general de gobernatorado vaticano, destituido deprisa y corriendo nada más denunciar una serie de irregularidades en el sector de la contratación de obras (obras en sentido material, y no de caridad).

Para los que hemos crecido en Italia, las intrigas vaticanas no representan una novedad significativa. Tampoco es una sorpresa que el Papa sea, según los bien informados, el último y más decidido baluarte de la honestidad y de la ética dentro de un Estado soberano que no difiere mucho de los demás en cuanto a tramas siniestras. ¿Alguien acaso se acuerda del cardenal Marcinkus, el banquero de Dios? Leed Wikipedia para refrescar la memoria. http://es.wikipedia.org/wiki/Banco_Ambrosiano

Como es de recibo en cualquier intriga que se respete, tampoco faltan a la cita los servicios secretos que, en el caso del Vaticano, parecen ser los "mejores y más eficaces del mundo", en palabras de alguien que algo entiende de intelligence: Simon Wiesenthal, el cazador de nazis.

Su papel parece haber sido crucial en los últimos movimientos y en las filtraciones a la prensa de ciertas noticias en lugar de otras. Según argumenta el periodista del L'Espresso Stefano Livadiotti, el servicio secreto habría - en un primer momento - actuado de una forma muy propicia a los intereses del "primer ministro" cardenal Bertone, para luego desviarse y tomar derroteros bien distintos. Las razones del cambio, las desconocemos. Lo que sí afirma el periodista transalpino es que el jefe del intelligence vaticana es Domenico Giani, un ex agente del Sisde, el poderoso y enigmático servicio secreto italiano, nombrado en su día por el mismo Bertone, quien parecía tener un control absoluto sobre él. Los últimos hechos confutan esta teoría y nos dejan una imagen difícilmente inteligible de los servicios secretos pontificios.

El medio kilómetro cuadrado en el que se encierra el Estado Pontificio, es - desde siempre - el lugar más grabado, registrado y controlado en el mundo: cámaras escondidas por todas partes, tarjetas para entrar con microchips que permiten un seguimiento en tiempo real de los movimientos del visitante, agentes camuflados por doquier.

Es fácil entonces imaginar a un anciano Papa deambular por los jardines en compañía de sus allegados, cansado y con una sombra triste en la mirada. Se le puede imaginar y así tal vez sea en la realidad, ya que los rumores van en ese sentido y apuntan a unos cambios radicales en los próximos meses.

Desde mi humilde y muy laica perspectiva, y basándome tanto en las notas biográficas que he leído sobre él como en el seguimiento de su acción pastoral, lamento profundamente que el Papa alemán esté en horas bajas. No es y no era el conservador que quisieron vendernos, ni tampoco el hombre frío que se describió en ocasiones. Sobre estos temas, ya escribí en su día un post:

http://www.expansion.com/blogs/minima-inmoralia/2011/06/11/ratzinger-el-falso-reaccionario.html

Ojalá Ratzinger aguante un tiempo más, y ahonde en el ejercicio de higiene moral que está llevando a cabo en su propia casa. En una época tan tacaña en cuanto a liderazgos éticos, un personaje como él nos viene bien hasta a los laicos empedernidos.

http://youtu.be/tLpVnTVrP2

 Descubren planes para magnicidio de Benedicto XVI




Escándalo de corrupción en el Vaticano


http://youtu.be/SkBtkcNCEb8

1 comentario:

  1. EL PADRINO, por algo es una pelicula clasificada como OBRA MAESTRA. No hay que ir muy lejos.
    Que a cerca del Papa Juan Pablo el primer Juan Pablo que murio de repente.

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